Madrid (II)
Volver a Madrid para encontrarme y solo ha pasado una semana. Reencontrarme con viejos amigos y conocidos, con bares que pronto serán los bares de toda la vida, con putas y travestis en las esquinas, con modernos y maricas, con un trabajo que me obliga a mantener la cabeza fría todos los días, con la resaca del día después en la boca, con calles y plazas que empiezo a reconocer y a poder ubicarme más o menos sin tener que sacar el móvil para saber dónde estoy.
Madrid es la cuarta ciudad en la que vivo, nueva habitación, nuevos compañeros de piso, acabo de cumplir veintiséis aunque ayer una chica de ojos grandes me dijo que si tenía nueve más (será la mala vida, igual estoy en medio de la crisis de los treinta y no me he enterado). C. me ha regalado una guía muy interesante como regalo pseudoirónico de mi regreso a esta ciudad como local, espero ir tachando muchas cosas antes de marchar. Creo que esta vez irá bien.
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